Éste árbitro dirigió un partido de fútbol entre dos equipos de Bielorrusia en estado "deplorable" si así se le puede llamar. Es decir... para que se entienda mejor, "el flaco tenía un pedo terrible".
Muchos pensaron que se trataba de un dolor muscular en su espalda, pero rápidamente se enteraron de que el hombre estaba alcoholizado.
Muchos pensaron que se trataba de un dolor muscular en su espalda, pero rápidamente se enteraron de que el hombre estaba alcoholizado.
Moraleja: ¿beber con moderación?
Y hablando de árbitros, dejo un extra sobre el referee gay
0 comentarios:
Publicar un comentario